El debut de Aguirre y Márquez con el TRI
La llegada de Javier Aguirre y Rafael Marquez al banquillo mexicano, pintaba para ser la luz al final de un túnel que un trimestre atrás parecía no tener final. Sin embargo tras los encuentros ante la selecciones de Nueva Zelanda y Canadá, las conclusiones que sacar y las sensaciones que deja la selección, son las mismas que dejaron al fracasar rotundamente en la Copa América.
El encuentro ante la selección Neozelandesa, terminó 3 a 0 a favor de la selección mexicana, sin embargo, al jugar con un cuadro abastecido de estrellas y jugadores de renombre, México se veía obligado a dominar el partido y ser contundente frente al arco, puntos que no se cumplieron a lo largo del encuentro, por lo que la victoria fue agridulce.
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Por otro lado, el partido ante el conjunto de la hoja de maple fue el más decepcionante y trabado de la serie. Ningún equipo se hizo del control y del dominio del esférico, hecho que tornó el juego en una batalla constante e interminable por el balón en el medio campo. Ambos equipos tuvieron en total 2 jugadas de gol frente al arco rival.
Es notorio el hecho de que la situación dentro de la selección mayor ya no se trata solo de una cuestión de entendimiento, coordinación y talento al jugar, sino que ha evolucionado ya en un problema de mentalidad y desenfoque. Los jugadores no juegan haciendo uso de sus habilidades dentro del campo, juegan con un constante temor a cometer un error y es bien sabido que la consciencia obedece al inconsciente.
Tanto Aguirre como Márquez tienen un sinfín de tareas importantes de cara a los encuentros ante el club de fútbol Valencia en Puebla y el partido ante Estados Unidos en Guadalajara. Ambos entrenadores tienen no solo la necesidad, también la obligación de levantar a sus jugadores tanto en nivel futbolístico como en cuestiones de mentalidad y disciplina.
Es importante resaltar que México será co-anfitrión de la Copa Mundial de la FIFA 2026 junto con Estados Unidos y Canadá, por lo que es de suma relevancia el presentarse a dicho compromiso con un plantel no solo competitivo, sino también respetado por las demás selecciones y que se impongan como locales en el Azteca, el gigante de acero en Monterrey y en el Akron en Guadalajara.
Es muy pronto para calificar y juzgar la llegada de Javier Aguirre y Rafael Marquez al banquillo mexicano, ya que queda un amplio camino por recorrer previo al mundial, sin embargo de mantenerse el nivel deportivo presentado en sus últimos encuentros, se ve lejana la posibilidad de dejarle gratas sensaciones a la afición en la copa del 2026.
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